viernes, 19 de octubre de 2012

We're not in Kansas anymore...

Leyéndote, me da la sensación de que con mi anterior post abrí un poco la caja de los truenos. 
Ya cuando lo estaba redactando, sentía que no era ese el tono que en un principio habíamos pensado para este nuestro blog. Pero Antonio me hizo comprender que es mejor ser realista que optimista/pesimista y ahora mismo esta es nuestra realidad.

Siempre me he preguntado por qué Dorothy, en The Wizard of Oz, se empeñaba más y más en regresar a esa Kansas en tonos sepias teniendo la oportunidad de quedarse a vivir para siempre en el colorido mundo de Oz, con todos los maravillosos nuevos amigos que había ido conociendo a lo largo de su aventura. La respuesta es bastante obvia, echaba de menos a su familia, su hogar. Y eso está muy bien. Se podría decir que ambos tenemos un poco el síndrome Dorothy (aunque me atrevería a decir que tú un poco más que yo). 
Pero Bea, no tenemos que olvidar que Dorothy era una simple niña que por supuesto aún tenía que crecer y aprender de los adultos que la rodeaban. 
Nosotros, nos pese lo que nos pese, ya somos adultos. Ya no podemos estar dependiendo de nuestros padres. Tenemos que empezar a depender de nosotros mismos. Madrid nos sirvió de ensayo (¡¡qué tiempos aquellos!!) y no tiene que ser diferente ahora estando cada uno en una parte del mundo. Tenemos que encontrar nuestro propio hogar. El que conocíamos hasta ahora ha sido el que nuestros padres han construido para ellos y al que, por supuesto, siempre seremos bienvenidos.

Ayer, jueves, era noche Porn Idol en Heaven. El Porn Idol es una evento maravilloso en el que 9 personas anónimos (casi siempre todos maricas) se suben al escenario y se desnudan para luego ser juzgados por el jurado y el público. 
A lo que iba, que ayer fue una chica la que se alzó con el premio (100 libracas). Ella era pa' verla, así como un poco friki ella, con el pelo teñido de rojo pasión, gafas de pasta, tez pálida, seguro que incluso fan de Tim Burton. Por supuesto yo me dejé las manos aplaudiendo su actuación. Pero lo que más me fascinó fue cuando, al acompañar a mi amigo Alex a fumar fuera, la veo abrazada a dos chicos que se están besando el uno al otro pero cual es mi sorpresa cuando, de repente, ¡¡ella también empieza a meter morro!! No pude por menos de hacerle una reverencia. Ya al volver a entrar al local mi amigo Alex, que es de Salamanca, me espetó, ¡¡Estamos nosotros como para volver a Zamora o Salamanca!!, y creo que no puede estar más acertado.

Creo que tanto tú como yo, hoy en día, estamos donde tenemos que estar. No podemos dejar pasar esta oportunidad añorando el estilo de vida acomodado que teníamos antes sino que tenemos que empezar a sacarnos las castañas del fuego. Por supuesto se nos permite estar de bajón de vez en cuando y echar de menos lo justo y necesario. Pero no se te olvide, mi querida amiga, que ha llegado nuestro momento de volar del nido. Puede que ya no estemos en Kansas anymore... pero es que tampoco somos unos niños anymore...

No hay comentarios: