viernes, 12 de octubre de 2012

Suspiros de España

Ya puedes guardar tus instintos homicidas para otro momento que por fin he encontrado un ratejo con conexión a internet para poder escribir por aquí.
Han sido unas semanas muy ajetreadas; primero con la visita de mi hermana la semana pasada y luego entre ir a clases de inglés y demás, ni un momento he podido encontrar para nosotros. No he tenido ni tiempo de leer tus aventuras en Manhattan ni demás historias que ya has ido contando en tu blog personal

Tenía millones de cosas que, a lo largo de estas semanas he querido contarte, pero el paso del tiempo ha hecho que esas cosas se fueran diluyendo en mi cabeza. Sin embargo no puedo dejar pasar por alto el día de "presunta fiesta" que se supone hoy para todos los españoles de bien. No voy a entrar a debatir sobre esos temas, más que nada porque se escapan de mi entendimiento. Siempre he sido una persona bastante desarraigada en cuanto a mis orígenes. Sinceramente no veo cual es la gracia de sentirse orgullo por haber nacido en un determinado lugar/país/ciudad/wherever... cuando es algo completamente azaroso que se escapa a nuestro control como seres humanos. Y además, ¿¿cómo puedo sentirme orgulloso de ser español cuando me he visto obligado a emigrar de España debido a la incompetencia de todos y cada uno de sus dirigentes, la mayoría más preocupados en "españolizar" que en realmente sacar al país de una crisis que se hace cada vez más y más fuerte??

De verdad, siento haberme puesto de este rollo aquí, pero realmente es algo que me fastidia. No sé cuando volveré a ver a mi novio ni tampoco cuando volveré a verte a ti y solo de pensarlo me entra una rabia increíble que consigo calmar al darme cuenta que todo lo que estamos viviendo nos hace crecer como personas. 


1 comentario:

Antonio dijo...

Es muy, muy difícil... Te quiero, Alberto.